ALDEA DE POL

Dos veces al mes hay “Feira en Baralla” claro que llamar “Feira” al tipo de actividad comercial que se desarrolla en estos días, es un eufemismo. En otros tiempos, no muy lejanos, a feira de Baralla se caracterizaba por la compra-venta de ganado entre productores y tratantes. Miles de “reales” o de pesetas cambiaban de mano en esos días sin otro contrato que el “apretón de manos”. El campo da Feira era el lugar de encuentro de las gentes del Concello y de otros lugares; los días de feira eran motivo celebración y lo que es más, de intercambio cultural. Los tratantes o “chalanes” servían de emisarios e incluso de “porteadores”; lo mismo traían que llevaban noticias y encargos. Junto al ganado, otros comerciantes y artesanos ofrecían sus productos; así acudían los herreros con “coitelos, machados, rodos e outras ferramentas” y como no as pulpeiras. Las ferias han ido desapareciendo o transformándose en “mercadillos” en los que hay de todo, menos ganado. La de Baralla no iba a